Saludos.
Esto me sucedió el día después que reingresé a diálisis.
El día lunes 16 de diciembre luego de estar trasplantado por casi 14 años y medio y a 5 años de detectarme un rechazo crónico ingreso nuevamente en diálisis.
Me colocaron un cateter porque la caida de la función renal fue abrupta y no hubo tiempo siquiera de hacerme una fístula.
Habia sacado turno para realizarme dicha operación, pero era para mediados de enero. En parte se extendió por el tema de las fiestas.
Pero justo se precipitó todo en poco tiempo.
Llegué a diálisis en silla de ruedas. Me habian inyectado Reliveran (Metoclopramida clorhidrato) para frenar los vómitos de sangre, ya que mi organismo estaba saturado en urea.
Hacia ya unos dias no comia, dormia mucho y no tenia hambre y vomitaba desde hacia dos. Salí del quirófano, llegué a la sala y me hicieron dos horas de diálisis.
¡Al terminar la diálisis me sentía como un león!. ¡Tenía hambre y podía caminar!.
Llegué muy animado y con hambre a la habitación. Mi esposa no podía creer el cambio. ¡Yo tampoco!
Me volvieron a inyectar Reliveran y dormí casi toda la noche (me molestaba un poco el catéter).
Al otro día volví a diálisis. En silla de ruedas, porque estaba aún un poco débil, pero pude pararme y caminar en la sala.
Me hicieron tres horas de diálisis. Salí mucho mejor.
Cuando llegue me volvieron a inyectar Reliveran. Yo ya no vomitaba desde antes de la diálisis del día anterior.
A los 5 minutos empecé a sentir la «lengua dormida» no podia hablar bien. Comencé a empeorar. Cada vez peor.
Mi cabeza comenzó a moverse sola. Igual que mi carretilla. Apretaba los dientes bien fuertes y me dolia, pero yo no podia controlar nada de eso. Era algo irreal que me sucedia.
Los médicos vinieron a verme y dijeron que era una reacción extrapiramidalítica. Yo les dije que podia ser el Reliveran, pero me dijeron que no creia que podia ser eso. Después me enteré que no sabia que me pasaba y por primera vez se enfrentaban a esto.
No contento con esto le pedi a mi hermana que me comprara Reliveran que queria ver el prospecto.
Mi hermana así lo hizo y era tal cual lo que yo creia: El Reliveran entre sus efectos secundarios puede producir reacción extrapiramidal. La solución era inyectar difenhidramina (lo que se conoce comercialmente como Benadryl). Les pregunté a los médicos si me podian inyectar eso y adjunté el prospecto a mi reclamo y mi esposa se los llevó. Los médicos asintieron a mi pedido.
Me inyectaron con Benadryl y tuve una mejoría de la reacción pero no demasiada. Luego de un rato el efecto se fue como vino.
La carretilla y las muelas me dolieron hasta el día siguiente porque la reacción me hacia apretar muy fuerte la boca. yo corria mi lengua (afortundamente lo podia hacer) para que mis dientes no la apretaran.
Como experiencia fue interesante porque experimenté sensaciones de movimientos que no podia controlar. Fue todo muy extraño.
Pero si los médicos hubieran escuchado lo que yo decia (y que por otra parte resultaba muy lógico) la reacción quizás hubiera durado menos o al menos no habria pasado el mal momento que pasé que no sabía lo que me estaba sucediendo.
La incertidumbre fue muy fea porque yo pensé que iba a quedar así para siempre.
Es importante que los médicos atiendan los reclamos de sus pacientes. Ha habido una clara evolución respecto de las necesidades de los pacientes. Hoy los pacientes se informan y tratan de conducir su enfermedad tanto como el médico.
Si bien no somos médicos, tampocos somos aquellos pacientes pasivos de otrora época que salian convencidos de lo que decía el médico. Hoy la situación ha cambiado. Salimos convencidos, pero queremos «cruzar» la información. Internet ofrece una gran ayuda (siempre y cuando sea información fiable), podemos ampliar nuestros horizontes de conocimientos.
La credibilidad del médico al paciente debe correspoderse en forma inversa.
Saludos